El pecado en bolas

Nooo, no os asustéis, no os voy a hablar de nada obsceno. Se trata de una receta sencillísima que pillé al vuelo viendo la tele y que he hecho en casa y queda riquísima. Además, es facilísima y casi no ensucia, porque sólo necesitáis un recipiente mediano para microondas y un tenedor. Se trata de unas fabulosas, dulcísimas y empalagosas BOLITAS DE COCO.

BOLITAS DE COCO

Ingredientes:

100gr de leche condensada
50gr de coco rallado
40gr de chocolate blanco
(Un poquito más de coco para rebozar las bolitas)

(Como las tabletas de chocolate blanco a veces son de 75gr, la proporción es de 94gr de coco y 185 de leche condensada, aproximadamente. Así os ahorráis las matemáticas).

Elaboración:

1. En un recipiente mediano (en el que nos vaya a caber todo) y apto para microondas, fundomos el chocolate blanco. Como cada microondas es diferente, os recomiendo fundirlo en tandas de 20 segundos e ir removiendo para que no se os queme, de 10 segundos hacia el final.

2. Echar la leche condensada (poco a poco) al chocolate fundido. Si veis que el chocolate se vuelve muy duro y difícil de manejar, dadle 10 segundos de microondas. Lo removemos todo con un tenedor, ya que es lo que queda a medio camino entre el batidor de varillas y la cuchara, y el utensilio con el que menos producto desperdiciaremos.

3. En tandas, añadir el coco rallado a la mezcla y seguir removiendo.

4. A fin de que la masa sea más fácil de trabajar, dejamos enfriar un poquito la mezcla en la nevera. Luego la sacamos, vamos formando bolitas y las rebozamos con coco rallado. Para que queden más duritas, es recomendable ponerlas también en el frigorífico.

Voilà!

Empanada de pollo y cebolla caramelizada

Esta receta es ideal para un tentempié, una excursión o una cena de picoteo. Se trata de una empanada de pollo y cebolla caramelizada muy consistente, nutritiva y fácil de hacer.

EMPANADA DE POLLO

Ingredientes:

• Un paquete de masa quebrada (sección congelados, vienen dos hojas, e incluyen papel de horno). 
• Filetes de pechuga de pollo
• Queso de sándwich
• Jamón york
• Tres o cuatro cebollas
• Tres o cuatro cucharadas de azúcar (una colmada por cebolla)
• Un chorrito de aceite de oliva
• Condimentos (sal, orégano, pimienta negra...)

Elaboración:

• Descongelamos la masa quebrada (unos 30 minutos a temperatura ambiente). 
• Precalentamos el horno a 180º aproximadamente. 
• Pelamos y cortamos la cebolla en juliana, en tiritas; la pochamos con un chorrito de aceite y, cuando empiece a estar doradita, añadimos una cucharada sopera bien colmada por cada cebolla que haya en la sartén. Removemos con un utensilio de madera y pronto empezará a caramelizar. Parar el fuego y dejar templar. 
• Extendemos una hoja de masa quebrada sobre el papel de horno (obviamente en una bandeja metálica de horno). 
• Encima de esta hoja de masa, colocamos los filetes de pechuga, con cuidado de que sobre espacio en los bordes para poder cerrar luego la empanada. 
• Sazonamos y condimentamos la pechuga. 
• Colocamos la cebolla caramelizada encima de la pechuga (intentando que no se nos desborde :D). Tal vez aún esté caliente, pero no pasa nada. 
• Encima de la cebolla ponemos las lonchas de queso y, sobre éstas, las de jamón york. La colocación de estos ingredientes es orientativa, mientras se pongan las pechugas en la base, lo demás da más o menos igual). 
• Colocamos la otra hoja de masa quebrada encima de todo el relleno y cerramos la empanada uniendo las dos masas. No sólo hay que unir, también hay que cerrarlo bien dando pellizquitos o doblando para que no salga el contenido. 
• Hornear unos 20-30 min, preferentemente sólo con fuego inferior o fuego inferior/ventilador. Hacia el final se puede dorar la masa por arriba. 
• Si veis que se os ha salido un poco de líquido del caramelo de la cebolla, no pasa nada, es normal. Ahora sólo tenéis que encargaros de disfrutar este plato, que tanto acepta ser comido en caliente como en frío. ¡Salud! 

Crema de calabaza

¿Qué mejor en pleno otoño, cuando ya está llegando el frío, que una cremita de calabaza bien sabrosa? Para regocijo de todos/todas los que luchamos contra los kilos, es un plato apto para dietas, muy completo y nutritivo y que, además, juega con el sabor dulzón de esta cucurbitácea.


Ingredientes:

500-700gr de calabaza ya cortada
50-100gr de zanahorias baby
2 cebollas
1 o 2 calabacines
(1 - 2 patatas, que pueden sustituir el calabacín, si se opta por la receta no-light)
Aceite de oliva
Condimento





Elaboración:

- Lo cortamos todo en daditos (es mejor que quede curiosito, por si a alguien no le gustan las verduras trituradas y prefiere comerlo a modo de puchero*).
- Colocamos todas las hortalizas en una olla y echamos agua hasta que cubra (aprox. 1 litro).
- Echamos un chorrito de aceite de oliva y condimentamos con ajo y perejil (yo los uso en polvo, y son riquísimos). Además, a esta receta le va un poquito de pimentón picante, por lo del colorcito. Si optáis por la opción no-light, le podéis echar sal.
- Dejamos hervir aproximadamente una hora (entre media hora y una hora y media, según la olla, el fuego, y las cantidades, pero vamos, el tiempo es a ojo, con una hora, seguro que no os equivocáis). De tanto en tanto, remover con una cuchara de palo. Sabréis que está hecho si, al darle con una cuchara de madera, la calabaza se parte fácilmente.
- Podemos servir directamente o triturar con el Túrmix, para hacer una crema deliciosa y calentita.

Ideas para decorar: cebolla frita, tomate seco, un poquito de pimentón dulce, picatostes, queso...

* Si a alguien le apetece, a este puchero le puede echar garbanzos, eso sí, será más contundente.

Presentación de puchero

Presentación de crema con cebollita frita