Ingredientes:
- Pan. Yo usé una barra y media y me salieron 20 torrijas.
- 600 ml de leche (o más, si queréis).
- Canela
- La piel de un limón
- Azúcar (dos cucharadas para la leche merengada, y el resto para decorar).
- Dos huevos.
Utensilios:
- Jarra microcook para hacer la leche merengada, que la podéis hacer a mano, pero de 5 minutos, pasáis a 20 o más.
- Batidor de varillas, de plástico si usáis el microcook.
- Bandeja o plato para mojar el pan. Yo usé un pírex pequeño cuadrado, que tenía la profundidad suficiente.
- Plato para rebozar.
- Bandeja de horno con papel vegetal.
Elaboración:
- Precalentamos el horno a 200º y hacemos la leche merengada: 600 ml de leche, la piel de algo menos de medio limón, canela y dos cucharadas de azúcar. 5 minutos con el microwok en el microondas a máxima potencia, removiendo a la mitad.
- Cortamos las rebanadas de pan y las iremos colocando por tandas en la bandeja para que se encharquen en leche.
- Ponemos la leche merengada encima del pan y esperamos que se la vayan bebiendo, y giramos las rebanadas para que acaben bien empapadas. Esto es muy importante, porque el horno siempre reseca un poco.
- Según las saquemos de la leche, rebozamos las rebanadas en huevo y las colocamos sobre el papel vegetal puesto encima de la bandeja de horno.
- Al acabar, echamos con mucho cuidado el resto de leche que tengamos encima de cada una de las rebanadas para que el centro quede bien empapado y luego las pintamos con el resto del huevo. Ya que lo tenemos, ¡lo aprovechamos todo!
- Horneamos 6-7 minutos por cada cara, según el horno que tengáis (igual con 5 basta, pero en el mío no). Es muy importante girarlas a mitad de cocción. En el segundo tiempo veréis que se hinchan. No pasa nada.
- Las sacamos del horno y las torrijas se bajarán. Luego les echamos un poquitín de azúcar o miel por encima, y a disfrutar. Se pueden comer calientes, templadas, del tiempo o frías, que están ricas igual. ;)